Invertir en inmuebles sin comprar ninguno: las Socimi
Todos sabemos que España es uno de los países donde hay más tradición en la compra de viviendas, tanto para vivir como para invertir. Durante mucho tiempo, tanto los grandes patrimonios como la gente de clase media, compraba inmuebles como forma de inversión, que además les podían proporcionar rentas periódicas en forma de alquileres con una rentabilidad notable. Sin embargo, la burbuja inmobiliaria ha generado que ahora muchos inversores sean reacios a volver a comprar inmuebles.
Por ello, a finales de 2012 se decidió crear una nueva figura que era un concepto novedoso en España ya que contaba con un régimen fiscal especial. El objetivo no era otro que reactivar un mercado que estaba en plena depresión.
- Deben invertir al menos el 80% de sus activos en inmuebles urbanos para el alquiler, adquiridos en propiedad y/o en participaciones en el capital de otras SOCIMI.
- El 80% de sus ingresos deberán proceder de alquileres y de dividendos de otras Socimi.
- Tienen un requisito de permanencia de activos en su balance de 7 años.
- Su deuda no puede superar el 70% del activo.
Además, como ocurre con los REIT, están obligados a repartir en dividendos casi la totalidad de sus beneficios, concretamente el 80% de las rentas derivadas del arrendamiento y el 100% de los dividendos recibidos en el caso de que sean accionistas de otras SOCIMI.
-Tributan a un tipo especial del 0% en el Impuesto de Sociedades.
-Tienen una bonificación del 95% en el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD) y en el Impuesto de Trasmisiones Patrimoniales (ITP) para las ganancias patrimoniales.
- No deben retener los dividendos distribuidos a sus socios, tanto personas físicas como jurídicas.
¿Por qué invertir en Socimis y no comprar pisos?
Básicamente hay cuatro grandes motivos para preferir la inversión en Socimis respecto a la inversión directa.
1.- Liquidez: Invertir vía Socimis es tan fácil como lo es invertir en cualquier empresa cotizada, y por tanto desinvertir es casi inmediato. En cambio, si compramos un inmueble pueden pasar meses hasta que obtengamos el dinero.
2.- Diversificación: Al invertir en Socimis invertimos en decenas o cientos de viviendas, hoteles y una gran variedad de productos, ubicados en muchas áreas geográficas. En cambio, si compramos una única vivienda estamos expuestos a un mayor riesgo de caída del precio o del pago de derramas extraordinarias.
3.- Ventajas impositivas: como hemos visto, estas sociedades tienen grandes bonificaciones fiscales. Al contrario, la última reforma fiscal elimina ciertas ventajas que tenían los propietarios, como la reducción del 100% del rendimiento neto en caso de arrendarle la vivienda a jóvenes menosres de 30 años con rendimientos netos del trabajo o actividades económicas inferiores a una determinada cantidad.
4.- Gestión profesional: Además de olvidarnos de tener que elegir los inmuebles en los que invertir, tampoco tendremos que llevar el seguimiento de los cobros, reuniones de Comunidad de Propietarios, la búsqueda de inqulino o los pagos puntuales de gastos y derramas en los que puedan incurrir los inmuebles.